11 tesis sobre el informe de la alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos en Colombia

por Lina Arregocés
Argenpress.info
14 de marzo de 2005

"En los ordenadores de la abuela ONU no caben más cadáveres de Ruanda"
[Del Poema "Despabílate amor" de Mario Benedetti]

Acabamos de ver en Alemania, dentro del marco de las películas exhibidas en la Berlinale celebrada en el mes de febrero, la impresionante "Hotel Ruanda" que documenta la dramática historia de un hombre (Paul Rusesabagina) que salva la vida de más de mil personas en su hotel de la ciudad de Kagali durante el holocausto ruandés. Si bien es cierto que la película cae en algunos vacíos y que a la luz del análisis transdiscursivo (como se les da por decir a los especialistas) se queda, digamos, corta, también es cierto que muchas de las escenas tienen la capacidad de comunicarnos toda la impresión del horror que constituyó asistir a un espectáculo de muerte como aquel, que llevó al héroe real de la historia a afirmar: "En lugar de salvar vidas, la ONU evacuó perros. Un perro europeo, fue más valioso que un ser humano ruandés" o lo dicho por el propio Kofi Annan (encargado de las operaciones de los cuerpos de paz en Ruanda en esa época) al cumplirse 10 años del que podemos llamar también con razón Holocausto: "Después del genocidio me dí cuenta de que yo podía y debía haber hecho más para dar la alarma y obtener apoyo... La comunidad internacional le falló a Ruanda y eso siempre nos deberá dejar con un sentimiento amargo de pesar".

Cada ser humano que se aproxima al arte lo hace desde su esquina y supongo que los alemanes viendo aquellas escenas espantosas se aproximaron a su propio Holocausto, que curiosamente había sido recordado recientemente con todo el rigor al cumplirse los 60 años de la liberación del campo de concentración y exterminio de Auschwitz. Yo confieso que mis pensamientos volaron en cambio hacía Colombia y nuestra propia tragedia. Durante todo el transcurso de la película y aún más, durante la siguiente que vimos ese día ("Thumbsucker") una tragicomedia gringa que expresa toda la basura de esa sociedad a partir de la historia chatarra de un adolescente que se chupa el dedo y toda la gente bastante enferma que lo rodea, no dejé de pensar en nuestra propia tragedia y sus páginas de infamia larga que podrían inscribirse, con lujo, al lado de las mencionadas.

Todas estas reflexiones, vienen a mi mente hoy leyendo el informe de la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de la ONU sobre Colombia correspondiente al año 2004, que intento resumir en estas 11 tesis.

Tesis número 1: Miente que de la mentira algo queda

No se registran las desapariciones forzadas a pesar de estar tipificadas en el código penal vigente, lo que permite que algunos casos de desaparición forzada se incluyan como secuestros. Tampoco se registran las ejecuciones extrajudiciales, las torturas y los actos crueles e inhumanos, las detenciones arbitrarias y las violaciones al debido proceso, de acuerdo a los estándares internacionales establecidos.

Los informes oficiales no discriminan adecuadamente si el autor de un homicidio ha sido el Estado o un particular actuando con el consentimiento de éste, lo que impide considerar las violaciones al DIH como violaciones a los derechos humanos, en el caso en que hayan sido cometidas por autores o funcionarios públicos o particulares que actúen bajo su determinación o su complicidad.

Del año 1993 al 2001 se registraron 1.230 casos de tortura, cifra que cayó por arte de magia a 6 entre el 2002 y el 2004.

En el 2004 se presentaron como muertos en combate a muchas víctimas ejecutadas por los paramilitares.

En el caso, por ejemplo, de los sindicalistas asesinados en Arauca, el ministro de Protección Social no consideró las muertes como vinculadas a la actividad sindical, cuando este hecho era absolutamente claro y las victimas estaban bajo programas de protección especial.

Se anota el debilitamiento de los procedimientos judiciales mediante la utilización frecuente de manera poco rigurosa de testimonios de personas desmovilizadas o reincorporadas. La oficina declara su fracaso en el intento de que los servidores públicos involucrados en estas irregularidades sean procesados.

La Alta Comisionada declara como crímenes de guerra muchas de las violaciones incluidas en el informe y señala que algunos de ellos podrían constituir crímenes de lesa humanidad. No obstante, en Colombia el Hegemón continua negando la existencia de un conflicto interno y caracterizando lo que ocurre en Colombia bajo el obtuso marco del terrorismo.

Tesis numero 2: Dime con quién andas y te diré quién eres

El informe de la ONU establece y documenta los vínculos entre Estado y grupos paramilitares de una manera bastante evidente. La relación con las Fuerzas Armadas aparece bastante definida en algunos apartes, aunque se escinde en otros momentos. La implicación de agentes del Estado en todos los aspectos del conflicto es clara y deslindarla es una de las tareas recomendadas por la Alta Comisionada.

El informe se refiere a "inconsistencias entre los objetivos propuestos y los métodos utilizados", lo que dicho de otra manera significa que no se ha visto la voluntad del Gobierno para transparentar las relaciones entre estos cuerpos y sus acciones.

Expresa que la lucha contra el paramilitarismo es "precaria" y denuncia los nexos entre miembros de la fuerza pública y "otros servidores" públicos y los mencionados grupos.

Manifiesta que las Fuerzas Militares en muchas ocasiones realizaron operaciones en las que "inobservaron" los principios humanitarios.

Se denunciaron también violaciones a la independencia judicial que vincularon a fiscales destacados ante órganos de seguridad, situación que compromete la autonomía de éstos sobre todo en casos que involucra a miembros de éstas instituciones.

La Alta Comisionada ha observado que deben fortalecerse las políticas gubernamentales de lucha contra el paramilitarismo y en especial contra los nexos de "servidores" públicos y estos grupos criminales. Se refiere también al mayor o menor grado de infiltración de éstos en "varios niveles de la administración departamental y local así como a nivel social".

Se recomienda evitar por parte de funcionarios del Estado "expresiones de complacencia o entendimiento con el paramilitarismo". Pregunto: ¿Qué procede cuando el propio presidente de la República manifiesta preocupación por la desprotección de las zonas de donde han salido los paramilitares que se han reinsertado, porque "allí de donde sale la autodefensa, entran los guerrilleritos"?

Una de las notas de pie de página del informe da como ejemplo que evidencia esta situación las conclusiones finales recogidas en el informe final de una misión especial para la Policía Nacional al señalar: "Preocupa el gran número de investigaciones internas por vínculos con estructuras criminales, en particular, paramilitares".

¿Son insuficientes los casos Cajamarca, Guatarilla y el de los sindicalistas de Arauca asesinados, para ilustrar estas siniestras concurrencias?

El informe aclara además que la oficina "considera sólo las denuncias públicas creíbles que ha estudiado cuidadosamente y contrastado con diversas fuentes, incluyendo su propia observación directa".

Tesis número 3: "Despabílate amor, que el horror amanece" (Mario Benedetti, poema mencionado)

La situación de los derechos humanos continuó siendo crítica en cuanto a los derechos civiles y políticos.

Se observó un incremento de denuncias de ejecuciones extrajudiciales y violaciones al debido proceso. Siguió siendo alto el registro de denuncias de detenciones arbitrarias, allanamientos ilegales, torturas y tratos crueles e inhumanos o degradantes y desapariciones forzadas. También se registró uso excesivo de la fuerza y otros abusos de autoridad en la represión de actos de protesta.

Se denuncian abusos de los soldados campesinos y "ciertos abusos" cometidos en la ejecución del Plan Patriota. ¿El Iraq colombiano?

Persistieron las debilidades en las respuestas estatales a las alertas tempranas (el Sistema de Alertas Tempranas [SAT] es una herramienta que se empezó a gestionar en el año de 1998 por el Gobierno Nacional como mecanismo para repeler los ataques y amenazas provenientes de los grupos al margen de la ley; es decir, para prevenir violaciones masivas a los derechos humanos y desplazamientos forzados. A través de este sistema se puede medir la tendencia que está abarcando el conflicto interno, situar los grados de riesgo de los municipios y regiones, y reproducir un sistema eficaz de comunicación que permita de manera rápida un proceso de respuesta ante las amenazas que sufren las comunidades en el territorio nacional) así como de los programas de protección de grupos vulnerables del Ministerio del Interior.

La presencia de la fuerza pública fue esporádica (¿afortunadamente?) en comunidades de alto riesgo, pero sería pertinente preguntarse por qué.

En cuanto a la prevención y protección, en el SAT en el 2003, de 84 informes de riesgo sólo fueron aceptados 32 (38%) y en el 2004, de 54 fueron aceptados 13 (el 24%).

En el 2003 en 37 casos se consumó la infracción (44%) y para agosto del 2004 se había consumado la infracción en 27 de los 54 informes de riesgo (50%).

Pero hay más: En el 2003 de 32 informes que no se transformaron en alertas tempranas en 10 casos se dio la infracción (31%) y para agosto del 2004 se consumó la infracción en 6 de los 13 casos que no se convirtieron el alertas (46%). En el 92% de los casos, los paramilitares aparecen como el "riesgo" en estos informes.

Cómo explicar esta indiferencia. ¿Como complicidad?

Vuelvo al caso Ruanda y a la declaración hecha por Romeo Dellaire, jefe de las fuerzas de paz para la época del holocausto:

"Si una organización decidiera eliminar los 320 gorilas de la montaña, la reacción de la comunidad internacional sería mucho mayor". O decir como Bakunin: "Si Dios realmente existiera, sería necesario abolirlo".

Se recomienda clarificar los informes de los archivos de inteligencia militar, para evitar el uso indebido de este tipo de informes para la realización de capturas masivas, de allanamientos y como sustento de acusaciones.

Se recomienda excluir de éstos archivos a las personas que aparecen allí únicamente por el tipo de actividad que realizan, como son sindicalistas, defensores de los derechos humanos y otros líderes sociales.

Tesis número 4: Que vivan los pobres del mundo

La situación de los derechos económicos, sociales y culturales sigue siendo crítica.

Según el indicador de la línea de pobreza (LP), el 64% de la población colombiana vive en condiciones de pobreza y según la Contraloría General el 31% de los colombianos pobres se encuentra por debajo de la línea de indigencia.

El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) informa que el 20% de la población pobre percibe el 2,7% de los ingresos totales de la nación, mientras que el 20% de la población más rica concentra el 62% en sus manos.

El Banco Mundial sitúa a Colombia con el coeficiente Gini de distribución de la riqueza como el tercer país más desigual del continente americano.

El 40% de la población no está afiliada al seguro de salud, situación que se precariza cada vez más. Muchas personas debieron acudir a la tutela de sus derechos para ser atendidos, pero ésta favorece a los que tienen algún tipo de seguro de salud preferencialmente. La población más pobre continúa así en un estado de alta vulnerabilidad.

Pregunto: Si a esto le sumamos el abandono y la negligencia en el manejo de la salud pública, la privatización, el manejo político del Sisbén y la entrega a los paramilitares de las ARS, ¿en qué queda la salud del pueblo colombiano?

La Ley 100, engendro del Hegemón, modificó dramáticamente el sistema de salud en Colombia y engendró las fatídicas ARS a través de las cuales 500 mil millones de pesos han ido a parar a las arcas de los paramilitares, uno de los cuales, sentado entre los negociadores en Santa Fe de Ralito, es uno de los jefes del jugoso negocio.

¡Ah!... El informe observa un aumento en la construcción de vivienda... en beneficio particularmente de los estratos más altos.

Tesis número 5: Es mejor negociar con la viuda

La tesis anterior toma forma en muchas de las modalidades de desplazamiento y neutralización de las mujeres y niños como poblaciones de alta vulnerabilidad.

El informe observa que la mayoría de las violaciones de los derechos de las mujeres y las niñas quedaron impunes en parte por la ausencia de formación en género de las comisiones judiciales (!) y en parte por las prácticas sexistas de la justicia (!) especialmente en el área penal.

El desempleo afecta mayormente a las mujeres (18%) que a los hombres (14%).

A las mujeres se les persigue también por su género. Y se documentan casos de amenazas y operaciones de limpieza social que eligen sus victimas como castigo a su orientación sexual (lesbianas, prostitutas...).

Se denuncian abusos sexuales, violaciones de mujeres y niñas por parte del Ejército y algún caso en el cual la víctima terminó siendo procesada como victimaria.

Se alude a la comisión del delito de "esclavización" de mujeres por parte de las FARC en Tolima y Risaralda (!). Pregunta: ¿Cuál será la fuente de esta denuncia, que aparece un poco rara para un grupo armado donde más del 30% son mujeres? Sería interesante ahondar en ella.

Tesis número 6: Al caído caerle

Con una población de 68 mil reclusos (lo cual haría preguntarse por la cacareada impunidad en Colombia. O como diría Jorge Eliecer Gaitán, "la justicia es para los de ruana"), en Colombia hay un hacinamiento carcelario del 38%. EN Riohacha, Valledupar, Arauca, Bucaramanga, Medellín, Cali e Itagüí, supera el 100%.

Contrasta esta política de violación de los derechos de los prisioneros, con la mano amplia y comprensiva que se tiende a los paramilitares acogidos al plan de reinserción, a los cuales se les construirá (en versión comedia de La Catedral, la cárcel que se construyó Pablo Escobar) no sólo la cárcel sino un plan de vivienda, se les dará subsidio y tierras, se les hace una ley para que sus crímenes queden impunes y se les salva del riesgo de la extradición.

Tesis número 7: Las matemáticas no fallan

Se denunciaron presiones de la fuerza pública y el Gobierno para lograr la manipulación de estadísticas y partes de guerra para presentarlos como favorables a ellos (en casos para que no fueran dados a conocer a la opinión pública).

Por considerarlo muy interesante transcribo un aparte de la investigación sobre modelos dinámicos de guerra realizada por José Fernando Isaza de la Fundación Mazda y Diógenes Campos del Departamento de Física de la Universidad Nacional de Colombia:

"A simple título de curiosidad, si en agosto del 2002 las FARC tenían 17 mil efectivos y el ELN cuatro mil, y de acuerdo con las cifras oficiales en los años 2002-2003 el número de capturados, abatidos y desmovilizados asciende a 17.592, se concluye que las cifras son inconsistentes o que la capacidad de recuperación de la guerrilla es asombrosa. En este último caso, si a esto se agregan los 5.859 combatientes puestos fuera de combate durante los primeros cinco meses del 2004, se concluye que la guerrilla se recompuso totalmente".

O aceptamos la versión de unas FARC desarticuladas, que mantiene sin embargo una alta influencia en al población (curioso caso) como probarían los miles de auxiliadores que tiene a lo largo y ancho del país, si a las cifras de detenciones masivas (pescas milagrosas institucionales) nos atenemos.

Tesis número 8: Si el sabio aplaude, malo, si el necio vitupera, peor

El concepto de actos terroristas está reservado por el informe, casi exclusivamente a la guerrilla de las FARC, y hace referencia a una bomba en Apartadó donde murieron siete civiles y a una explosión de un carro bomba en Tame (Arauca) donde hubo dos civiles muertos.

El escudero del Hegemón, su ventrílocuo Santos, con la brillante inteligencia que lo caracteriza y de la cual da fe todo el país, en su estilo ramplón y sobreexcitado, a propósito de la reunión en Madrid para conmemorar el aniversario de los tristes hechos del 11 de marzo, resuelve la situación colombiana en un epitafio hecho a la profundidad de su capacidad analítica: ..."Lo que queda claro es que nuestras organizaciones armadas al margen de la ley caen, sin duda, en esta definición porque todas matan o lesionan civiles y no combatientes. Fin, entonces, de la controversia".

Comentario: No pienso que los líderes que se sentaban al lado de Santos en la mencionada conmemoración (Felipe González, el rey Juan Carlos, Fernando Henrique Cardozo, Kofi Annan y los ex presidentes colombianos Betancur, Gaviria y Pastrana) y el propio Santos tengan autoridad moral para mirar a sus gobernados de frente.

Tesis número 9: Cría cuervos y te sacarán los ojos

Para el informe es evidente cómo los grupos paramilitares continuaron a pesar del "cese de hostilidades" (!) declarado por ellos y la "desaparición" de su tradicional líder Carlos Castaño, su expansión y consolidación, incluyendo su inserción social e institucional a nivel local y regional así como su estrecha vinculación con el narcotráfico. Pregunta: ¿Será por eso que ahora el Hegemón propone el narcotráfico como delito conexo?

En Santa Fe de Ralito las autodefensas llegaron a la conclusión de que la confesión de delitos que les exigen en algunos de los proyectos que se discuten en el Congreso es un imposible absoluto. Mancuso, 'Ernesto Báez' [Iván Roberto Duque Gaviria, nota de Prensa Rural], Ramón Isaza y los otros jefes de las AUC no se ven sentados ante un tribunal de la verdad relatando con lujo de detalles cada uno de lo que ellos denominan "actos de guerra" y que la contraparte denomina delitos de lesa humanidad. Para solucionar este impasse han propuesto una fórmula alterna: la confesión colectiva. Todos los dirigentes están dispuestos a reconocer un listado de delitos que pueden llegar a incluir desde secuestros hasta masacres, siempre y cuando se trate de un reconocimiento general, y no de carácter individual (Tomado de la sección Confidencial de la revista Semana).

Tesis número 10: Los detalles no importan

En el conflicto colombiano no se observan los principios del DIH de limitación, distinción, proporcionalidad y protección de los civiles.

O como diría el Hegemón: "Me da mucha pena. Yo no puedo aceptar esas distinciones".

El informe se refiere a las denuncias de 10 homicidios de niños pertenecientes a la etnia Wayú (cinco quemados y una niña violada) por miembros de grupos paramilitares en Dibulla (Guajira).

Informa también sobre el caso de un niño torturado en Landázuri (Santander) acusado de robo.

El relator especial sobre la promoción y protección del derecho a la libertad de expresión y opinión, señaló "el difícil entorno que viven los periodistas para el pleno ejercicio de su profesión" y destacó la concentración de los medios de comunicación y la no aceptación de sindicatos en este sector (!).

Tesis número 11: "Los discursos deben ser tratados como prácticas discontinuas que se cruzan, a veces se yuxtaponen pero que también se ignoran o se excluyen" (Foucault)

La comunidad internacional, la izquierda colombiana, los movimientos sociales, la Iglesia, los organismos de derecho internacionales y en especial la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de la ONU, las ONG emplazadas en el país, han interpretado suficientemente la situación de grave crisis por la que atraviesa Colombia, que comporta la violación de los derechos humanos y la violación al derecho humanitario, de la profundidad de la implicación del Estado en estas violaciones, del nexo Estado-Gobierno-grupos paramilitares, del incumplimiento de las metas sociales comprometidas, del estado de horror en que viven miles de colombianos atenazados por el miedo, de la dimensión de la crisis humanitaria del desplazamiento interno, de la amenaza que significa para Colombia la reelección inmediata, de la desesperanza de los familiares de las personas retenidas por la guerrilla y el desespero de los propios retenidos, ahora lo único que se necesita es transformarla.